Después del parón debido a mudanzas y viajes varios, esta semana he vuelto a coger el pincel para terminar estas miniaturas del Séptimo de Caballería a pie, ampliando mi colección del oeste. Sigo pintando con una mezcla de triadas aplicadas con puntilladas y alguna veladura, a medio camino entre el nivel tabletop y las técnicas más elaboradas. Respecto al freehand de la bandera, me falta mucha finura en el trazo, y me envalentoné un poco con las estrellas sin hacer antes un patrón previo, motivo por el que los puntos están un poco descolocados. No obstante, vista la miniatura a una distancia prudencial, el resultado es bastante aparente. Para el uniforme he mirado referencias en internet, pero seguro que he cometido algún fallo histórico, que me perdonen los más puristas. En breve compraré más miniaturas del far west, probablemente de la gama de Artizan para que mi colección guarde coherencia de estilo y tamaño, aunque quizás empiece a probar también otras marcas.